Principales riesgos en el sector de la limpieza integral
Lesiones leves
Las contusiones, aplastamientos, arañazos, los cortes y pinchazos son heridas muy frecuentes y que, generalmente, no suponen un gran problema para la salud. El riesgo se incrementa cuando las medidas de seguridad no son suficientes y se pasan por alto detalles como residuos cortantes en la basura, obstáculos fijos o provisionales y mobiliario antiguo o de baja calidad.
Problemas en la espalda
Es muy común que el personal del sector de limpieza integral e higiene profesional se incapacite de sus labores por trastornos músculo-esqueléticos (lumbalgias, dorsalgias o lesiones cervicales). Por lo general, este tipo de problemas aparece tras levantar cargas pesadas o inestables, durante mucho tiempo o de manera incorrecta (mala postura). Así mismo, este tipo de afecciones también terminan por afectar otras zonas del cuerpo como los hombros, brazos, y manos.
Caídas al mismo nivel
La gravedad de este riesgo va a depender de la circunstancia en específico que se haya dado, sin embargo, es muy habitual que ocurran sobre todo resbalones, tropiezos y choques. Estas caídas son muy difíciles de prevenir, incluso con las medidas de seguridad adecuadas (ya sea por torpeza, imprudencia o inobservancia del personal). Suelen ser provocados por suelos húmedos, pulidos o irregulares, desorden y falta de iluminación.
Caídas de altura
Este tipo de inconvenientes sí suelen perjudicar considerablemente al individuo. No basta con mantener a margen las medidas de seguridad, sino que también se hacen imprescindibles medios auxiliares cuando se debe laborar en superficies de distinto nivel y con objetos fuera de alcance. Suelen ocurrir al limpiar ventanas exteriores de pisos superiores, arreglar cableado, ascensores, entre otros.
Exposición a productos químicos
En el sector de limpieza integral e higiene profesional, el uso de productos químicos (productos de limpieza) es evidentemente necesario. Lo que no es tan evidente es el riesgo que supone la exposición excesiva y constante a estos productos.
La limpieza, desinfección, abrillantado y demás labores de rango integral requieren el uso de sustancias químicas mucho más potentes que las normalmente usadas en casa; los distintos riesgos se deben a la falta de medidas de seguridad cuando hay exposición dérmica, respiratoria, digestiva y parenteral, especialmente cuando se trabaja con cloro, amoniaco, disolventes y ácidos. Lo ideal es seguir al pie de la letra las recomendaciones de los fabricantes para resguardar la seguridad.
Exposición a otras sustancias peligrosas
De igual forma, los productos químicos no son las únicas sustancias que pueden interferir en la seguridad de los trabajadores del sector de limpieza integral; las quemaduras, enrojecimiento, alergias y muchas otras reacciones pueden no ser tan graves si se comparan con aquellos riesgos biológicos propios de esta área laboral, que podrían estar relacionados con la presencia de mohos, bacterias e, inclusive, los residuos o desechos biológicos de humanos y/o animales.